miércoles, 16 de septiembre de 2009

The Shot

Fue, sin duda, el momento mágico del US Open y su protagonista Roger Federer, el mejor tenista de todos los tiempos con permiso de Rod Laver.

El serbio Djokovic aún deambula por la Arthur Ashe preguntándose "Was that shot real?", que en español viene a ser "¿Cómo coño ha hecho eso?".



Alguno pensarán que no es para tanto y que Yannick Noah -aquel inimitable jugador francés de los 80, el último que levantó la Copa de los Mosqueteros- lo hizo antes. Otros preferirán los intercambios eternos de golpes entre Wilander y Edberg, o alguna de las genialidades de John McEnroe o Jimbo Connors en el cenit de su juego.

Todo es opinable, pero lo que hizo Federer pertenece al mundo de lo imposible, del arte, de la magia. Lo hizo, además, en el último juego del tercer set, el que le daba el pase a la final contra Del Potro (¡enorme pibe!, merecido e inesperado campeón), rompiendo el servicio de Nole Djokovic y endosándole el juego en blanco.

Los dioses del tenis están radiantes.

1 comentario:

javier regueira dijo...

Jamás vi a Rod Laver jugar pero de los que he visto Federer me parece el más grande, no solo como tenista sino como persona.

Se viste por los pies que diría José María García, o era por la cabeza?

También me gustaba mucho Chuco jugando al tenís en Serín con el pantalón de portero de la Inmaculada.